ENTRADA RECIENTE

MONTEFRÍO

MONOLITO DE PEÑOL Y GUATAPÉ

J.J.D.R.
En la cordillera central andina, formando parte de la falla tectónica denominada Batolito antioqueño, se alza un monolito pétreo de singular apariencia conocido como Peñón de Guatapé o Piedra del Peñón cuya silueta es para los guatapeños icono natural y un reclamo turístico de gran relevancia para las localidades de (Guatapé y el Peñol) ambas ubicadas en el departamento colombiano de Antioquia.

MONOLITO DE PEÑOL Y GUATAPÉ Foto www.elcomercio.pe
Esta imponente roca de 220 metros de altura, 22 millones de metros cúbicos y 600 millones de toneladas de mica, feldespato y cuarzo, quedó aislada a unos 2137 metros sobre el nivel del mar tras milenios de violentos movimientos tectónicos y abruptas erupciones que acontecieron en estas regiones centrales de los Andes. Hoy día podemos contemplar la roca del Peñol y tratar de evitar no realizar un símil con el Pan de Azúcar brasileño.
Foto www.panoramio.com
La piedra del Peñol es un magnífico lugar para poder contemplar el paisaje que rodea la represa hidroeléctrica del Peñol-Guatapé. Guatapé significa en Quéchua “piedra y agua” y creo que no podía tener mejor traducción. Sus aguas provienen de la cuenca del Cauca-Magdalena y reúne las condiciones ideales para los deportes acuáticos que forman parte del nuevo ecosistema artificial creado por las empresas públicas de Medellín quienes demolieron buena parte del centro urbano del Peñol así como fincas rurales de la localidad de Guatapé para construir la que hoy día es la central hidroeléctrica más importante de Colombia. Las localidades vecinas son un reclamo turístico por el colorido de sus viviendas como las de Guatapé, cuyos vecinos llenan sus calles de hermosos mosaicos.

Foto www.notimerica.com
Hoy en día la ascensión a la imponente roca se ha convertido en un atractivo turístico. Luis Eduardo Villegas López, Ramón Díaz y Pedro Mel Ramírez fueron los primeros en alcanzar su cima en 1954 tras cinco días de lenta ascensión en la que sólo podían contar con los elementales y rudimentarios aportes de escalada que poseían en la época y que hacían que cualquier aventura en altura se convirtiera en un suplicio físico y mental.

Foto www.quellevar.travel
Hoy día la roca se sube por medio de una escalera de madera que fue construida en dos etapas (1955-1957, 1965-1971) hasta superar los 700 escalones de que dispone en la actualidad. En el año 1988 se comenzó a pintar con enormes letras blancas la palabra Guatapé por parte de vecinos de esta localidad quienes reclamaban la propiedad de la roca tras la construcción de la represa y tras continuos enfrentamientos con localidades vecinas como el Peñol.

Foto www.tripadvisor.com
Aquella osada idea, en la que a mi modo de ver se ridiculiza la naturaleza al pretender otorgarle algún tipo de particularidad o propiedad humana, quedó paralizada al tenerse en cuenta que estaban pintando un monumento natural y no una farola de la urbe, llegando con tanto retraso la denuncia que ya se habían escrito las iniciales GU sobre la roca como una mancha indeleble sobre el antiguo monolito que impasible, ante tanta absurda iniciativa, espera con paciencia que llueva pronto, mucho, y durante largo tiempo, para que de su lomo desaparezca tan lastimosa carga.

Aportes y Datos:
La piedra del Peñol
http://www.lapiedradelpenol.com/
Wikipedia
https://es.wikipedia.org/wiki/Piedra_del_Pe%C3%B1ol

Comentarios

  1. Subir los peldaños tiene merito, pero construirlos merece premio. Un abrazo

    ResponderEliminar
  2. Realmente es muy peculiar y las vista deben ser espectaculares.
    Besos

    ResponderEliminar
  3. Amigo Jorge, que buen regreso he tenido al leer la historia de esta hermosa piedra que encontré sin tanta información en facebook hace unos días.
    Me ha encantado volver a pasar a tu hermosa casa, donde la magia y el aprendizaje está asegurado. Un abrazo grandote.

    ResponderEliminar
  4. Hola Jorge, se ve muy bonito este monolito que como bien dices recuerda al famoso Pan de Azúcar y ami al verlo también me ha recordado al de Gibraltar, las vistas desde arriba se ven preciosas y es una lastima que hayan intentado pintar esas letras, esperemos que con el tiempo se vayan borrando, lo de subir por las escaleras ya tiene su merito con tanto escalón, yo no podría, a ver si algún día ponen ascensor y así los que tengan alguna minusvalía también puedan subir, he mirado lo del pueblo de Guatapé y se ve muy bonito y alegre lleno de tanto colorido, gracias querido amigo ya que gracias a ti conocemos otra belleza de la naturaleza.

    Besos.

    ResponderEliminar

Publicar un comentario