ENTRADA RECIENTE

MONTEFRÍO

CASTILLO BISHOP


J.J.D.R.

Alrededor del mundo se alzan curiosas edificaciones que muestran el poder que ejerce la imaginación sobre el espíritu del hombre. Me viene a la mente la casa Do Penedo en Portugal, la de Lino Bueno en Alcolea del Pinar en Guadalajara, un castillo de coral en Miami, una catedral que se sigue construyendo por Justo Gallego en Mejorada del Campo en Madrid, el jardín subterráneo creado por Forestiere en California, o el magnífico palacio edificado por el cartero Ferdinand Cheval en Hauterives, Francia; ejemplos todos ellos de dedicación y persistencia, construcciones llevadas a cavo por un solo individuo y todos ellos guiados por una similar pasión, la de dar vida a ideas y sueños que parecían imposibles.

Foto www.crp.org

Podríamos enmarcar el Castillo Bishop dentro de esta categoría de construcciones llamémoslas “curiosas” o “fuera de lo común”. Es posible que en este caso su creador Jim Bishop no se dejase llevar por una extrema necesidad proveniente de quién sabe qué designios ignotos y en realidad el resultado no naciera de un ideario eclesiástico ni onírico que estuviera implícito en su cabeza esperando ser ejecutado pero, observando esta edificación, desde luego cumple con los preceptos y características de aquellos capaces de dejar su huella y no pasar inadvertidos.

Foto www.elportalinmobiliario.com.mx

Con apenas quince años Jim Bishop compró un pequeño terreno al noroeste del pueblo de Rye al sur de Colorado, EE.UU., por menos de dos mil dólares. Ubicado en medio del Parque Nacional de Santa Isabel, aquel reducto de tierra le pareció un lugar idílico para en un futuro próximo construirse una cabaña en medio del bosque. Una gran idea que logró hacer realidad invirtiendo los ahorros que había conseguido trabajando con su padre forjando hierro en el negocio familiar, repartiendo periódicos o cortando césped para algunos vecinos de Rye.

Foto www.deviantar.com

En la década de los sesenta inició la construcción de la cabaña familiar en aquel lugar al que siempre gustaba de ir acompañado de amigos y familiares y en donde en aquel momento junto a su esposa Phoebe se convertía en el rincón más maravilloso del mundo para poder aislarse de todo. Poco a poco comenzó a levantar su cabaña con piedras y rocas de los alrededores. Desde un comienzo tuvo problemas con las autoridades locales, ya que no había ningún concepto implícito en su contrato de compra que indicase la posibilidad de edificar en su terreno, pero solventado aquel episodio, la edificación de su cabaña cada vez se convertía más en un proyecto de grandes dimensiones que en una simple obra de albañilería doméstica. En unos años, fue apilando rocas y piedras, y mezclando vidrieras a más habitaciones y elevando la estructura hasta alcanzar los cuarenta y nueve metros de altura en su torre más elevada.

Foto www.dreamstime.com

Durante mucho tiempo aquellos que pasaban por su terreno se quedaban boquiabiertos contemplando su edificio, y casi todos se marchaban comentando a Jim que aquello cada día se parecía más a un castillo que una simple cabaña de campo. Y la idea de levantar un castillo en el bosque parece que caló hondo en la mente de Jim Bishop quien acogió la idea como un nuevo proyecto y durante los siguientes sesenta años se dedicó a dar forma a su particular castillo, decorándolo con almenas y escalinatas, balcones y terrazas, tres habitaciones y un salón de baile techado y parapetado con vidrieras de colores que dejan que la luz del día decore con un prisma multicolor las estancias del castillo.

Visitantes en el Castillo Foto www.danellehallbooks.com

Desde sus inicios en la construcción, numerosos curiosos y visitantes se paraban para ver su trabajo. Amigos y algunos familiares le decían a Jim que debería de cobrar una entrada y buscar un beneficio a su trabajo. Nunca quiso. De hecho, a fecha de hoy, la entrada al castillo es totalmente gratuita y se puede visitar durante todo el año. Optó por dejar que cada cual, si realmente deseaba aportar algo lo hiciera por voluntad y a través de donaciones. Tiempo después, cuando el castillo estuvo terminado y las visitas de turistas se multiplicaron, obtuvieron algún dinero extra con la venta de recuerdos en la cabaña de madera.

Foto www.dorisdembosku.blog

Posiblemente el punto álgido de esta construcción fue cuando a través de un amigo recibió un cargamento de pequeñas placas de calentamiento de acero inoxidable que transportaba hasta el vertedero como desecho. En pleno trayecto se acordó de su amigo Jim y convencido de que le podría sacar provecho se las acercó a su casa. ¡Y tanto que le sacó provecho! Sobre un esqueleto de acero construyó una chimenea exterior a la cual añadió las pequeñas placas como si fueran escamas y, con mucha paciencia, su dragón estuvo terminado. Pero un dragón que no escupe fuego no es un dragón. Y fue cuando recibió el regalo de un quemador de globos y lo instaló en la estructura cuando aquella cabeza de dragón alzada entre almenas y escaleras de hierro comenzó a escupir fuego, y desde entonces hace las delicias de los visitantes que acuden cada fin de semana a contemplar el espectáculo del castillo Bishop.

Foto www.mymetmedia.com

Hoy día el castillo es un lugar de parada obligatoria si transitas por la carretera estatal 165. La difusión de imágenes en redes sociales y desde hace años de boca en boca, han hecho del castillo un lugar turístico y el más afamado del pequeño pueblo de Rye en Colorado. Incluso se ha creado una Fundación benéfica a favor de la atención sanitaria a los niños de las familias locales, fundación en donde recaen todos aquellos ingresos generados por las donaciones de turistas y eventos tales como bodas que se organizan dentro del castillo.
En día 28 de marzo del año 2018 un incendio, posiblemente provocado por un fallo eléctrico, destruyó la tienda de regalos anexa al castillo, afortunadamente sin ocasionar daños personales y sin que el castillo sufriera daño alguno.

Foto www.colorado.com

Cuando el tesón y la valentía, -algunos lo consideran locura-, vence la razón del ser humano, éste es cegado por una luz invisible que lo arrastra a ejecutar estampas visionadas en sueños lúcidos y poner la maquinaria de improvisación de sus conocimientos al servicio del ingenio de manera autodidacta; elevando, levantando, ensamblando y aglomerando estructuras y edificios que decoran el mundo como piezas de un Tente o Lego moderno, y no hacen otra cosa que demostrar que todo lo que el ser humano se propone con paciencia, estímulo y esfuerzo constante, se puede conseguir a pesar de todos los impedimentos que se opongan en su camino.

Aportes y Datos:
Web Bishop Castle org
http://www.bishopcastle.org/
La Brújula Verde
https://www.labrujulaverde.com/2016/03/bishop-castle-la-iniciativa-personal-plasmada-en-una-rareza-arquitectonica
Wikipedia
https://es.wikipedia.org/wiki/Castillo_Bishop
KKTV 11 NEWS
http://www.bishopcastle.org/


Comentarios

  1. ¡Cuántas curiosidades y todas muy atractivas! Enhorabuena.
    Un abrazo.

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    1. Hay mucha gente capaz de realizar cosas extraordinarias. Aquí en Madrid, en un pueblo llamado Mejorada del Campo, un solo hombre lleva toda su vida construyendo una catedral. Se llama Justo Gallego y hoy día, pese a sus muchos años, aún se le ve trabajar día a día sin descanso y es admirable contemplar lo que a realizado.
      Un abrazo.

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  2. Qué curioso! esas escaleras exteriores inclinadas empalmando las pasarelas de hierro lo hacen muy especial. Dejará huella, seguro. Un abrazo

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    1. Así creo amiga, de hecho ahora es ya un lugar de parada segura para quienes transitan por la zona.
      Curiosidades de la gente y el mundo.
      Un abrazo.

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  3. Hola Jorge!
    Siempre nos traes interesantes y desconcertantes historias, desde luego el castillo llama y de que manera la atención.
    Saludos!

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    1. Sí amigo Fran, comenzó su construcción sin una idea clara, pero le animaron a seguir elevando la estructura hasta que lo convirtió en una ilusión de piedra para disfrute sobre todo de los visitantes de corta edad, y también de los curiosos ávidos de lugares extraños.
      Un abrazo.

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  4. Siempre hay gente que deja huella con sus obras esta es una de ellas. Un abrazo.

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    1. Así es amiga, y no es nada sencillo, sobre todo cuando se realiza de manera autodidacta y por el mero hecho de soñar que es posible.
      Un abrazo.

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