J.J.D.R.
Surgen en el paisaje como un atávico
recuerdo atrapado en una espesa bruma temporal; como la visión de un arcaico
sueño inconcebible y enigmático sobre el cual nada sabemos. Su imperfecta
silueta de lineales y básicos rasgos no difiere mucho de otras representaciones
similares halladas en rincones muy lejanos, y es precisamente esta
característica la que representa un enigma para los arqueólogos. Mirando de
cerca la silueta de uno de los numerosos megalitos del valle de Bada uno tiene
la impresión de que estas representaciones, a pesar del tiempo y la distancia,
parecen haber sido creadas utilizando antiguos patrones desconocidos y que
escapan a toda lógica.
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Foto reydekish.com |
El valle de Bada está ubicado en la
isla Indonesia de Sulawesi, concretamente en el distrito de Poso, dentro del
Parque Nacional Lore Lindu. Junto a los valles de Besoa y Napu, conforman un
exótico ecosistema en el cual mora salvaje la fauna y flora autóctona de estas
regiones asiáticas. Bajo un dosel de espesa foresta, en solitaria presencia
entre los páramos del interior de la isla o agrupados en diversos rincones de
difícil acceso, de la tierra emergen extraños megalitos diseminados por la
isla, siendo su presencia y su significado un rompecabezas aún sin respuesta.
Para los Kaili, Kulavi o los Saber, etnias locales de estas abruptas regiones,
la presencia de las figuras megalíticas forman parte de sus leyendas tribales,
de cultos asociados a sacrificios realizados por sus antepasados; incluso
existe la creencia de que algunas de estas figuras son malvados antepasados, saqueadores
y malhechores que quedaron petrificados por la divinidad a consecuencia de sus maléficos actos. También
es frecuente encontrar entre las populares creencias locales, numerosas
historias que cuentan que las piedras parecen cobrar vida propia y cambian de
lugar como por arte de magia.
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Foto reydekish.com |
Para los arqueólogos, la presencia de
estos conjuntos megalíticos es todo un enigma aún sin descifrar. Estas figuras
antropomorfas, de las que se tiene constancia documentada al menos desde el s.
XIV, fueron redescubiertas en 1908, habiéndose datado, aunque no de manera
concluyente, que su antigüedad estaría entre los 5000 y los 2000 años, siendo
por tanto anteriores a los moái de la isla de Pascua. La morfología de las
siluetas representa tanto a hombres como a mujeres, claramente diferenciados
por la representación fálica en los hombres y el pelo largo en la figura
femenina.
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Foto de la red |
Sobre cuerpos que sobrepasan los cuatro metros de altura de media, destaca
una enorme cabeza, en la que son muy básicos los rasgos de nariz, boca y ojos,
representados por líneas rectas y simples. Es común que los brazos se muestren pegados al tronco, cuya representación es característica en otras figuras
similares halladas en lugares tan remotos como “Gobekli Tepe” ubicado en
Sanliurfa en Turquía, y que es el santuario megalítico más antiguo del mundo y
cuyas similitudes son verdaderamente curiosas. Estas figuras antropomorfas han
sido también halladas en otros lugares de Camboya o Laos.
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Foto esascosas.com |
La gran mayoría
aparecen solas, en apartados lugares cercanos a vaguadas y riberas de ríos, o
en páramos desiertos y lejanos, pero también se han descubierto conjuntos
megalíticos de varias figuras aunque son menos frecuentes. Como ya hemos
comentado, poco a nada se sabe del significado de estas figuras, y no se han hallado restos
humanos o herramientas que sirvan para poder conocer quiénes fueron sus
creadores y por qué y para qué fin se construyeron. Se cree que podrían ser
representaciones de divinidades relacionadas con cultos de fertilidad de la
tierra y los cultivos. A La par que estas figuras antropomorfas, también aparecen
representaciones zoomorfas en las orillas y márgenes de los ríos.
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Foto tomada de la red |
Junto a las
figuras, por toda la región aparecen diseminadas las conocidas como kalamba,
vasijas enormes de hasta dos metros de diámetros -sobre las que a ya tratamos
en el artículo el Páramo de las tinajas, de la cordillera Anmanita de Laos- y
que son también un enorme enigma para la ciencia, ya que no se sabe con certeza
si fueron utilizadas como tumbas, aunque no se han hallado restos humanos en
ninguna de ellas, o vasijas para el almacenaje de víveres o agua. En cualquier
caso, la ausencia de restos de asentamientos humanos, enterramientos, o restos
de útiles y herramientas, al igual que en los espacios en donde han sido
halladas las figuras megalíticas, hace imposible construir una historia
fidedigna de los orígenes de estas peculiares representaciones. Es notable
destacar la ausencia en la zona de una cantera de la cual pudieran abastecerse de la
piedra gris tan característica de estas figuras.
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JARRAS GIGANTES O KALAMBA Foto reykedish.com |
La figura conocida como Palindo (animador
o enterrador), está ubicada al sur de la pequeña aldea de Sepe; es la más
grande de todas con una altura de 4, 5 metros y destaca por sus grandes ojos,
su enorme nariz, y su miembro erecto. Otra figura muy significativa es conocida
como Langke Bulawa o brazalete dorado. Fue encontrada en un campo de arroz y
representa una figura femenina de un metro ochenta de altura. Maturu, cuyo
nombre significa “durmiente” es otra representación de casi cuatro metros de
altura hallada en el valle de Bada. Todas estas figuras megalíticas de contornos
ovalados y enormes cabezas presentan rasgos muy particulares, aunque similares
en su concepción con otras representaciones ubicadas en lugares tan remotos
como Australia, Isla de Pascua o Turquía.
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Foto elitereaders.com |
Porque si bien, aunque en un
principio nada tienen en común las figuras megalíticas halladas en los
yacimientos arqueológicos de Gobekli tepe, las representaciones de los Wandjinas
en las paredes de las cuevas de kimberley en Australia o los Moái de isla de
Pascua, y nada interconecta estos puntos geográficos; es plausible y hasta
lógico pensar que desde muy antiguo el ser humano adquirió conceptos culturales
y representativos similares en su concepción artística y representativa, pero de
igual manera, no deja de ser curioso que los resultados obtenidos en
ubicaciones tan dispares y alejadas geográficamente entre sí detallan rasgos de
similitudes tan asombrosas en sus figuras escultóricas y pinturas rupestres a
pesar de no haber habido “teóricamente” interacción entre estas culturas tan
lejanas y dispares.
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Foto aminoapps.com |
La isla de Sualwesi es
un punto geográfico de increíble atractivo. A su exuberante vegetación, junto a
sus paisajes salvajes y su exótica fauna, se une la variedad étnica y cultural
de gran simbolismo, ejemplo de ello son los ritos funerarios de la tribu Toraja,
quienes de cuando en cuando arreglan y sacan a pasear los esqueletos de sus
difuntos por las calles de sus aldeas, o son expuestos a las puertas de sus
hermosas casas cuyos tejados representan la testa de un búfalo, su tótem y
animal sagrado. Si ya de por sí Sulawesi es un destino de enigmática belleza,
su historia y relevancia arqueológica lo desmarca como punto de sumo interés
antropológico, habiéndose descubierto recientemente la representación de caza
más antigua hallada hasta la fecha.
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Foto liputan6.com |
Alrededor de este mundo que parece sacado
de un libro de ficción, escenario en el que Indiana Jones sería capaz de desenvolverse con
total comodidad, cada rincón de esta región del mundo parece esconder señales
ocultas que apenas somos capaces de dilucidar. En parajes que son tesoros
naturales, rodeadas de enigmática belleza, se alzan estas figuras megalíticas como
parte de un gran rompecabezas arqueológico o puzle al que le faltan piezas y
por tanto es imposible resolver.
Aportes y Datos:
Reydekish
https://reydekish.com/2015/12/09/megalitos-de-indonesia/
Tectónica
https://tectonica.archi/articles/valle-de-bada/
La brújula verde
https://www.labrujulaverde.com/2016/09/las-esculturas-megaliticas-del-valle-de-bada-en-indonesia-mas-antiguas-que-los-moai-de-la-isla-de-pascua
Wikipedia
https://es.wikipedia.org/wiki/Valle_de_Bada